Hoy vamos a preparar... PISTO CON MAGRO. Por todos ustedes señores.
Necesitaremos tomates, pimientos (italianos los prefiero), y carne magra cortada en tacos.
En primer lugar debemos preparar el tomate. Es bastante sencillo, hervimos agua, introducimos los tomates un tiempo corto para poder pelarlos cómodamente y los pelamos. Tomates a la sartén con aceite y sal y cuando estén hechos les pasamos la batidora. Apartamos el tomate frito.
A continuación troceamos los pimientos y los echamos en una sartén con aceite, cuando se vayan cocinando le añadimos el tomate frito y lo dejamos a fuego lento, por otra parte, vamos preparando la carne.
Sellamos primero la carne con aceite fuerte y después le bajamos el fuego, para que queden jugosos, sabéis ya que a mi me gusta cocinar con cerveza, así que le añadimos un buen chorro de cerveza y otro para vosotros, campeones. Cuando la carne este bien dorada y hecha, la añadimos al pisto y los dejamos un tiempo, que se conozcan, que se hagan amigos, que intimen.
Tenemos nuestro pisto con magro, amigos. Es un pisto manchego, sencillo, sin calabacín ni cebolla ni berenjena. Es el pisto de la post-guerra, el pisto de lo que tenemos al alcance de la mano, el pisto que ha alimentado y ayudado a sobrevivir a mucha gente de mi tierra. Sin accesorios, sin hipérboles. El pisto reducido a su mínimo exponente, la supervivencia culinaria.
Ale señores, ha sido un auténtico placer. Nos veremos pronto, muy pronto. No cerraré el blog, al contrarío. Pistoconmagro permanecerá abierto y yo seguiré compartiendo con vosotros mis conocimientos basura óptimos para una vida basura óptima, pero será diferente, con menos presión y más espontaneidad. Os agradezco mucho a todos los que habéis tomado parte del vuestro tiempo para compartirlo conmigo y mis sandeces, y a todos los que lo hagáis en un futuro.
Salud y Suerte compañeros.
Atentamente, Just Alkaide.